Guild Starfire II Dynasonic

En Guild Guitars siguen poniendo al día su catálogo eléctrico con la actualización de algunos de sus modelos que han sido clave a lo largo de la historia de la marca. Generalmente mantienen el concepto original de la guitarra con algunas actualizaciones para hacerlas más amables a los guitarristas actuales, que muchas veces buscan el tono y la imagen vintage pero que también necesitan un “playability” más contemporáneo.

Esto ha ocurrido con la Guild Starfire II Dynasonic, un modelo que tuvo su puesta en escena por primera vez en 1960, es en julio de ese año cuando aparece anunciada en el Musical Merchandise Magazine en versiones de una y dos pastillas.

Un poco de historia como siempre

Se trataba de una guitarra con un cuerpo single cutaway, hueco con agujeros en “f”, que podía ser laminado de arce o de caoba y perteneciente a la línea Starfire, cuerpo que se basaba en el de la T-100 Slim-Jim model que había sido presentada algunos años antes.

Mostraba un mástil de  de caoba de una sola pieza y diapasón de palorrosa con dot inlays, clavijas de fijación Waverly e inlay Chesterfield en la pala. Montaban pastillas o pastilla DeArmond y el puente era un AdjustoMatic, el cordal tenía la forma de arpa de la marca. El modelo Starfire III también se presentó en la misma fecha incluyendo  un vibrato Bigsby.

El puente AdjustoMatic era fabricado por la firma sueca Hagström y la guitarra venía con un golpeador negro en el que variaba la decoración del logo según fechas.

Construcción, pala, mástil

Pero volvamos a la actualidad y vamos a echarle un vistazo a la Guild Starfire II Dynasonic de hoy en día.

El instrumento tiene un aspecto que impresiona así de entrada, con su acabado glaseado en Royal Brown que deja ver todo el veteado de la madera. Se siente muy ligera con un peso de solo 2.850 kg, -sobre todo porque no tiene bloque central- , no cabecea y te adaptas a ella enseguida. Estéticamente es austera, pero los contrastes entre los colores de maderas y hardware tan acertados le dan destacado punto vintage.

La pala es con perfil “open book center raised” y presenta el logo con el nombre de la marca y la columna Chesterfield como ornamentación, el acceso al alma dual de la guitarra se realiza por el frontal dela pala. El clavijero es un Guild Vintage Style Open Gear en Gold y la cejuela está realizada en NuBone con una longitud de 43 mm.

Pasamos al mástil, está construido en caoba y el perfil es en forma Vintage Soft “U” se siente algo grueso al principio, aunque esto como siempre es percepción particular, a mí me suelen gustar que no sean muy slim y lo agradezco. Es cómodo y te desplazas por él fácilmente. El diapasón es de ébano, da sensación de estabilidad, aloja 20 trastes Narrow Jumbo y los bendings salen con facilidad a pesar de que viene con un 0.11, fácil.

Cuerpo, electrónica

Ya hemos comentado que se trata de una guitarra semi-hollow, la tapa es arqueada al igual que la trasera y junto con los aros laterales son todos de caoba. Presenta dos agujeros en “f” en la tapa y carece de bloque central, lo que le otorga una buena resonancia y un punto de reverb de forma natural. Al respecto del bloque central, pros y contras como en cualquier especificación que sea importante en un instrumento. Por un lado aligera la guitarra mucho y eso es una comodidad por otro lado te limita si quieres tocar con distorsión o niveles de gain muy altos, aunque lógicamente esta guitarra no está pensada para eso. Un punto de overdrive si que lo acepta y las sonoridades crunchys le van bien. Recomendable, si vas a tocar a volúmenes muy altos no estar muy cercano a la influencia de las frecuencias graves del bajista o puede que vibre la tapa produciendo un feedback que tal vez no te interese.

Por otro lado la guitarra lleva un puente Guild Tune-O-Matic, ¿Cómo que es un puente fijo? ¿Y cómo se sujeta? Pues tiene un bloque interno de madera a la altura del puente al que va atornillado y que a su vez sirve para mitigar los posibles feedbacks indeseados, curioso.

La guitarra monta un set de pastillas DeArmond Dynasonic Gold and Black en posiciones de mástil y puente, se seleccionan y con un switch de 3 posiciones y los controles son volumen y tono por cada pastilla, estos tienen bastante recorrido por lo que permiten precisar bastante bien el ajuste.

Las Dynasonic actuales son una reproducción cercana al diseño original de los años 40s, incluyen imanes Alnico V ajustables individualmente que se traducen en agudos brillantes y graves redondos. Tienen un salida mayor que las originales por lo que consiguen mayor versatilidad y por otro lado se pueden ajustar en altura.

Por último, la guitarra no tiene golpeador y la entrada de jack es lateral, con ello acabamos la descripción del instrumento.

Sonido, conclusiones

No podemos dejar de reseñar que la combinación Starfire-Dynasonic se hizo muy popular por ser usada por Jerry Garcia de los Greatiful Dead durante los 60s, ese tipo de asociaciones que retratan una época.

Podemos concluir en que la guitarra tiene las virtudes sonoras de calidez y sustain que ofrece un semihollow y a su vez dado lo estrecho que es su cuerpo, resulta cómoda para los guitarristas acostumbrados a la robustez de un cuerpo sólido. Como se suele decir, lo mejor de ambos mundos.

La guitarra resulta blandita a pesar del calibre con el que viene, como ya comentábamos antes, sonando desenchufada muestra mucho sustain. Al amplificarla en la pastilla del mástil suena dulce, con los graves definidos y controlados, no muy mediosa y con agudos dulces, brillantes y nada metálicos, se podría tocar jazz perfectamente. Con la del puente toman presencia los agudos con un cierto punto twangy, no olvidemos que las Dynasonic no dejan de ser unas single-coil. Añadiéndole overdrive gana músculo y mordida, aún así no se nos ha acoplado.

La Starfire II es una guitarra que se merece una prueba en tu tienda más cercana si es que estás buscando una guitarra en esta onda, no decepciona.

José Manuel López