Tom Anderson Drop Top

Tom Anderson Guitarworks es una compañía ubicada en Newbury Park, California, y donde se construyen algunas de las guitarras custom-boutique mejor reputadas de las últimas décadas. Al frente de ella se encuentra Tom Anderson que cuenta con un enorme background como constructor, que se inició en 1977 cuando trabajó para Dave Schecter, otro de los nombres míticos en la historia reciente de la guitarra moderna.

Historia e innovación

Fue el propio Schecter el que animó a Tom para que montara su propia compañía y así poder desarrollar su lado más creativo en la construcción de guitarras. Comenzó fabricando pastillas para Schecter Japan y poco después ya estaba haciendo mástiles y cuerpos para John Suhr, Roger Sadowsky y Jim Tyler. Ya llegados al 90 comienza a centrase en hacer instrumentos terminados, incluso fabricando su propia pintura.

Fueron los primeros en utilizar máquinas CNC para mantener la consistencia en la fabricación, así como el trabajo de adaptación junto a Bob Taylor del uso de la luz ultravioleta en el secado de los instrumentos pintados.

También comenzaron a emplear un sistema de unión cuerpo-mástil denominado A-Wedgie, que consiste en una cuña compuesta que requiere poca presión para mantener el mástil estable y en consecuencia, usar solo dos tornillos en la unión en lugar de cuatro como suele ser habitual. El uso del sistema Buzz Feiten para mejorar la afinación es otra de sus características.

Como vemos es una compañía investigadora y de vanguardia en técnicas constructivas, consiguiendo con ello unas guitarras de corte contemporáneo, de mucha calidad, comfort al tocar y tonos novedosos.

Después de esta pequeña introducción vamos con la guitarra que vamos a revisar que no es otra que la Tom Anderson Drop Top

Tom Anderson Drop Top

La Drop Top fue introducida en 1990 y ya entonces fue la primera guitarra tipo Strat o mejor dicho Super-strat con tapa de arce, ahora llevan una de un grosor de 3/16 pulgadas, bien en arce flameado como la que tenemos entre manos o quilted maple, koa o walnut.

La primera impresión que transmite es de exquisitez en los acabados y componentes, ligera, se adapta muy bien al cuerpo y es absolutamente cómoda.

La pala es tipo aleta de tiburón con las esquinas redondeadas, el clavijero de bloqueo con los postes de las cuerdas E (grave) y A más altos y string retainer para las dos primeras cuerdas,  posibilita que todas las cuerdas salgan de la cejuela prácticamente en el mismo ángulo, lo que va a redundar en un ajuste muy preciso. En el frontal se ve el logo de la marca estampado.

En la parte trasera muestra el número de serie y un grabado con el logo del sistema Buzz Feiten. El acceso al alma está en la base de la pala. La cejuela es de hueso y mide 1 11/16 pulgadas.

El mástil es de arce caramelizado, al igual que la pala acabado en satinado natural, muestra un perfil “even taper” que es el conocido toda la vida como “standard”, es decir en forma de “C” que no se estrecha mucho, su grosor va desde 21mm en el primer traste a 22,6 en el traste 12. El diapasón es de radio compuesto 12”-14”, lo que supone una variación bastante sutil.

Monta 22 trates Jumbo de acero inoxidable, el trabajo con ellos es impecable, ni la más mínima arista, cantos abovedados, da gusto hacer un bending. La longitud de escala es de 25 1/2”.

 

Cuerpo, electrónica

La unión del cuerpo-mástil es atornillada con el sistema A-Wedgie que hemos comentado antes. El cuerpo es de aliso chambered  dejando un bloque central y sobre él la tapa de arce flameado en un acabado de una fina capa de poliéster en Natural Yellow Sun que deja ver todo el figurado del arce, muestra un rebaje en la parte superior trasera y también en donde se apoya el antebrazo, de ahí el nombre de “Drop Top”.

Las guitarras Tom Anderson siempre montan pastillas de la marca, en este modelo y en configuración HSS tenemos en posición de mástil y central un par de SC1 con las piezas polares a ras, parecen single-coils por su aspecto pero en realidad son humbuckers stacked con una sonoridad vintage y hum cancelling. En la posición de mástil hay una HC3, una humbucker convencional con tapa cromada, con salida “hot” y carácter vintage que da un empujón cuando se necesita algo de músculo.

Al respecto de los controles, la Drop Top selecciona las pastillas con un selector de cinco posiciones clásico con un push/pull en el control de tono que suma la pastilla del puente a la del mástil o en la mezcla de mástil-centro.

Entre los controles máster de volumen y de tono se encuentra un mini-toggle de tres posiciones con una función doble, en la posición superior divide la humbucker en single-coil, en la posición intermedia es un humbucker standard y en inferior realza los medios. Aunque se podría hacer técnicamente, este interruptor no divide las pastillas de mástil y central pero en la posición inferior si que impulsa los medios de ambas.

El puente es un trémolo vintage de seis selletas de bloque.

 

Sonido, conclusiones

La guitarra es versátil sonoramente hablando e ideal para quien toque distintos estilos, las SC1 proponen un sonido limpio cercano al brillo de Fender, con agudos redondeados y medios bien presentes, si lo compras con una Strat vintage se nota la diferencia tonal pero el objetivo de la Anderson es ser eficaz en esas áreas musicales donde las sonoridades sesenteras no siempre funcionan.

La HC3 tiene una salida bastante pequeña, con medios presentes y gruesos, que sin embargo no dominan al resto de frecuencias, suena agradablemente abierta. La diferentes mezclas de pastillas y si te gusta tocar jugando con el control de tono y el volumen, consiguen una versatilidad importante, el boots de medios funciona como lo que es.

En esta guitarra se plasma lo que es el concepto de superstrato, una guitarra versátil y moderna, con acabados y construcción muy cuidada, total atención a los detalles y estable como para aceptar cualquier reto musical. Una máquina perfecta.

José Manuel López