Marshall Origin 20C
Algunas marcas clásicas dentro del mundo de la guitarra tienen ganada a pulso su fama al ser responsables del diseño y la fabricación de guitarras y amplificadores que han formado y forman parte del imaginario colectivo de los profesionales y aficionados a la guitarra. El hecho de estar en algunos casos más de medio siglo haciéndolo tiene sus pros y sus contras.
Uno de los puntos a favor es sin duda que tienen una imagen y unos productos icónicos en el catálogo que son una base fuerte, algo que a su vez se convierte en contra cuando los más puristas no quieren ni un milímetro de evolución, y cualquier cambio genera un descontento, pero amigos estamos en el siglo XXI y las marcas evolucionan o seguramente mueren sobre todo en un contexto tecnológico imparable.
Marshall es sin duda una de esas compañías que busca el equilibrio entre innovación y su propio legado donde mantiene reediciones en el catálogo para aquellos que solo quieren los tonos clásicos de los años 60 y 70 compensando con nuevos productos high-tech.
Esto nos lleva hasta la gama Origin, que fue el lanzamiento más interesante de la marca en años y que sugiere el intento de complacer a casi todos al combinar los tonos y el estilo tradicionales de válvulas Marshall con un montón de características contemporáneas útiles, de hecho parece inspirado en los Marshall Plexis tanto en look como en algunas de las sonoridades que ofrece.
Construcción, válvulas
El modelo que vamos a revisar es el Marshall Origin 20C, un combo 1 x 10 monocanal a válvulas con un Celestion G10 VT Jr y un tamaño similar a un Princeton Blackface, lo suficientemente potente para el directo a la vez que ligero de mover. Si parece poco, existe la posibilidad de montar un stack con sus salidas externas de 8 y 10 ohms, así que no le tengas miedo a la pegada del batería si es necesario. Tiene un peso de alrededor de 14 kg y unas medidas de 52 mm (ancho) x 440 mm (alto) x 240 mm (profundo).
El Origin 20C estéticamente ofrece una sensación vintage tanto en el tolex, la rejilla, los potenciómetros… El amplificador alberga cinco válvulas, 3 ECC83 en el previo y dos EL34 de potencia una combinación también clásica.
Controles
En el panel superior nos encontramos con los siguientes controles, el Powerstrem que te permite seleccionar entre los modos de potencia High (20 vatios), Medium (alrededor de 10 vatios) y Low (alrededor de 5 vatios).
Luego ya de izquierda a derecha, el Gain, que controla la cantidad de ganancia del previo que se aplica al sonido, tirando del mando se activa un refuerzo de ganancia que activa el nivel de saturación del previo, función que se puede realizar desde el pedal que viene incluido, en ese caso anularía función del control desde el panel del combo.
A continuación el set de ecualización de bajos, medios y agudos junto al control Tilt, este control puede combinar entre el tono normal y el high treble propios de los previos de un Marshall clásico, cuando se gira totalmente en sentido contrario a las agujas del reloj, permite acceder a una estructura sonora más sutil. Por lo contrario, cuando se gira totalmente en el sentido de estas, el control tilt aumenta el brillo del sonido, haciendo que sea más cortante. A las doce en punto estaríamos en el equilibrio entre ambos amplificadores (JTM o Plexi)
Seguimos y llegamos al Master que ajusta el volumen de salida y a su lado el Presence que ajusta la respuesta del amplificador aumentando los agudos.
Los controles Tilt y Presence tienden a aumentar el brillo, algo que debes tener en cuenta, además no vas a necesitarlos demasiado para conseguir un tono equilibrado.
En el panel trasero tenemos las salidas para conectar a distintas pantallas, salida DI (conecta el amplificador a un dispositivo de grabación externo o a una mesa de mezclas utilizando esta toma de salida con emulación de altavoces añadida) la entrada para el footswitch de dos vías ( boost y activación del loop de efectos) el send/return del loop de efectos y la entrada de corriente.
En uso
En realidad un ampli monocanal de estas características en básicamente plug and play, como en todos los amplificadores de válvulas el Master tiene total influencia sobre el overdrive que se aplica a la salida, combinado con el Gain puedes crear algunos sonidos saturados clásicos. El sonido se centra en ese rango medio británico clásico en lugar de en los graves que hacen temblar el suelo… lo cual no es necesariamente algo malo. En términos de carácter sonoro básico, es totalmente un «pequeño Marshall”.
Tiene un headroom limitado y las válvulas de salida crearán algo de crisis si subes el nivel del master, equilibrar esto con la ganancia del preamplificador es clave para controlar la intensidad del overdrive y la carnosidad general del amplificador.
Los tres modos funcionan bien, aunque el Low suena algo débil al aumentar la ganancia con un poco de compresión y algo de reverb, es todo lo que necesita para asentarse en la mezcla.
El boost consigue un verdadero engorde, consiguiendo que los tonos a punto de romper se conviertan en algo más sustancial, esto ayuda a las pastillas del puente. Las posibilidades de esculpir tu sonido jugando con el set dice ecualización son grandes solo toca cacharrear un rato.
Los primeros Marshalls tenían una gran flexibilidad con un diseño de control muy simple y el Origin 20 es igual de versátil, lo que lo convierte en una opción ideal para el blues, el rock clásico y el indie, con las características modernas suficientes para satisfacer la mayoría de las necesidades, especialmente si le sumas un pedal de overdrive.
Will Martin
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