TECH 21 Hot Rod Plexi

Lo que en principio era algo para su uso personal se convirtió en muy poco tiempo en el primer dispositivo emulador de amplificador de válvulas que permitía mandar la señal obtenida a una PA o a una mesa de mezclas…y en un formato pedal.

 El producto se consolidó  al ser aceptado por los músicos que no quedaban indiferentes a los tonos que emitía esa pequeña caja. Desde entonces Tech 21 ha seguido proponiendo opciones eficaces y multifuncionales para facilitar el trabajo de los músicos.

Entre esas propuestas nos encontramos con un pedal que replica los tonos ofrecidos por un Marshall de finales de los sesenta, una de las etapas musicales dentro del rock de mayor relevancia, no es otro que el Plexi. Se denomina de esa manera porque en la época entre 1965-1969 y antes de que Marshall usara su panel frontal de aluminio dorado donde ubicar los controles de los amplis, estos estaban sobre un panel de plástico, de “Plexiglass”.

CONSTRUCCIÓN, CONTROLES

Este Hot-Rod Plexi, está fabricado en los USA y viene en una caja metálica –como las cajas de galletas- una presentación que garantiza seguridad y buen look para el pedal.

Ya el stompbox propiamente dicho viene presentado en una caja metálica, esta vez si una aleación robusta y sólida, para proteger perfectamente los componentes del pedal. El fondo es una pintura metalizada negra sparkle y sobre él en dorado, las letras con el logo y las rotulaciones de los controles.

El Tech 21 presenta un circuito analógico responsable de tonos vintage con la fiabilidad que propone una unidad contemporánea en cuanto a consistencia se refiere.

Los botones para controlar el pedal de izquierda a derecha, son bastante standard y nos encontramos con un Level para ajustar el nivel de salida de la unidad, un Tone muy musical, permanecerá plano cuando está  sobre las cinco en un reloj –ahí estaría al máximo- y según vas decreciendo va recortando frecuencias agudas sin por ello perder presencia de medios o llegar a embarrar en graves. Le sigue un Punch que sitúa la sonoridad en torno a unos 500Hz -con el botón en las 12 horas- según variemos el ancho de banda vamos a recortar o realzar la señal y nos va a permitir ajustes necesarios, por ejemplo un control pasivo para sonidos limpios es eficaz, pero si la señal ya va por derroteros saturados, será necesario un buen balance de medios, algo que le puedes ofrecer con el Punch. A su lado tenemos un Drive,  que nos permite ajustar la cantidad de ganancia y saturación, que dicho sea de paso es mucha la que proporciona este pedal. Está diseñado para interactuar con el volumen de la guitarra, lo puedes poner en un crunchy y limpiar el sonido bajando el volumen o “enguarrarlo” más al aumentarlo. Esto te da mucho control sobre dinámicas cuando estás tocando, Michael Landau es todo un experto en esto por citar un ejemplo.

Por último nos queda el Hot, esta función es como tener una 12AX7 extra en el previo, se activa desde un switch de pie en el pedal, silencioso, va a aumentar la ganancia de manera independiente por lo que no se puede ajustar desde el botón de Level hasta 28dB, no actúa como un Booster por lo que no te va a dar mayor volumen. Se puede regular desde el botón del pedal y te va a llevar a zonas verdaderamente high gain.

SONIDO Y CONCLUSIONES

El pedal promete emular las sonoridades de un “Plexi” y de alguna manera lo aproxima mucho, es un sonido con tintes orgánicos, naturales y que al igual que algunos Marshall suena mejor en el contexto de una banda que él solo, encuentra su espacio muy fluidamente. Las opciones de lograr sonoridades son muy sencillas y a su vez permiten disfrutar del juego de precisar mucho tu sonido, desde el propio pedal y desde la guitarra. Suena bien con poco volumen y con amplis pequeños por lo que se puede usar perfectamente en casa o espacios no muy grandes sin molestar. Sin ruidos de fondo. Esta caja encierra mucho rock en ella.

Nos parece un producto muy conseguido y si no puedes tener un verdadero Plexi, lo tienes en un pedal ¿Te apetece probarlo?

José Manuel López.